El Gobierno estudia condonar la deuda externa a Cuba vía Presupuestos

Los beneplácitos y parabienes del Ejecutivo de Rodríguez Zapatero con la dictadura cubana cobran fuerza estos días. Detrás de la visita de la secretaria de Estado de Cooperación, Leire Pajín, a la isla caribeña el pasado fin de semana, para reanudar la cooperación para el desarrollo de Cuba, subyacen otros intereses.

Según publica este martes el diario Negocio, el Gobierno habría colocado entre las prioridades del presupuesto del Ministerio de Asuntos Exteriores para el próximo año “la recuperación de la interlocución con el régimen cubano”. Precisamente, un fin para el que, según fuentes de Exteriores citadas por el rotativo, se contempla la condonación de la deuda que el régimen castrista mantiene con España y que asciende a casi 2.000 millones de euros.

En total, la dictadura de Fidel Castro debe a España 825 millones de euros de los que 125 son créditos FAD y 700 deuda comercial. Si a estas cifras se le añaden los intereses de demora, el montante total se situaría en torno a los 1.719,5 millones de euros.

Actualmente y en términos técnicos, -dice el diario- estos fondos se encuentran en situación de “impago”. No obstante, no sólo está acreditada la deuda y el retraso en el pago, sino que la dictadura cubana ha declarado, sin dar explicaciones, que no tiene previsto pagarla. Por este motivo, Cuba representa el 51 por ciento de las cuentas pendientes que tiene España.

En cualquier caso, la tarea que se propone el Ejecutivo entraña sus dificultades, ya que, debido al régimen totalitario que oprime a la isla, Cuba no es miembro del Fondo Monetario Internacional y no se puede beneficiar de los acuerdos globales. Así las cosas, el Ejecutivo tratará de reajustar la deuda mediante el mantenimiento de acciones bilaterales con las autoridades cubanas.

La última operación que llevó a cabo el Gobierno español en esta línea tuvo lugar el pasado mes de julio. Ahora, las autoridades españolas intentarán que los agentes financieros tengan en cuenta las circunstancias económicas de la isla y la escasa capacidad de pago del país.